Esta semana tiene lugar en Finlandia la reunión inicial con la que arranca BIOMAPS (BIO-intelligent Manufacturing of Multifunctional Bio-based Polymer Systems), un ambicioso proyecto europeo financiado por el programa Horizon Europe. Durante los próximos tres años, BIOMAPS desarrollará una nueva generación de plásticos biodegradables de altas prestaciones, fabricados mediante avanzados procesos biotecnológicos y diseñados para aplicaciones industriales exigentes.
BIOMAPS abordará el desarrollo de plásticos fabricados a partir de bacterias —los denominados PHAs— que, mediante procesos químicos de vitrimerización, adquieren propiedades avanzadas como la autorreparación, la estabilidad térmica y química, y la capacidad de ser reciclados químicamente. Estas características permitirán su adaptación a distintos sectores productivos para ofrecer una alternativa real y sostenible a los plásticos derivados del petróleo.
En la Universidade de Santiago de Compostela, el proyecto está representado por el investigador del Centro Singular de Investigación en Química Biolóxica e Materiais Moleculares (CiQUS) Massimo Lazzari, quien, junto a Ana María Otero y Manuel Romero, del Instituto de Investigación do Medio Acuático para Unha Saúde Global (iARCUS), lidera uno de los bloques principales del proyecto, centrado en la evaluación de la biodegradación y el reciclaje biosintético de los nuevos materiales. El equipo compostelano evaluará el comportamiento de los materiales en condiciones reales de degradación y buscará desarrollar métodos para recuperar monómeros útiles a partir de residuos plásticos, utilizando tanto enzimas especializadas como consorcios bacterianos adaptados. Parte de estos ensayos se realizarán en biorreactores diseñados por el propio equipo, combinando técnicas microbiológicas y espectroscópicas avanzadas.
El consorcio, que recibió una financiación de alrededor de 5 millones de euros, está coordinado por el centro tecnológico finlandés VTT y reúne a once socios de ocho países europeos. Entre ellos se encuentran centros de investigación y universidades como el Politécnico de Turín, la Universidad de Turku, la Universidad de Sassari o la Universidade de Santiago de Compostela, así como empresas innovadoras como la biotecnológica BIOPLASTECH (Irlanda), la startup INURU (Alemania), STRANE Innovation (Francia) y el fabricante automovilístico STELLANTIS, que participa a través de su marca OPEL. El proyecto combinará el conocimiento científico con la experiencia de empresas del sector para acercar estas soluciones al entorno productivo. Esa colaboración entre investigadores e industria permite no solo innovar en el diseño de materiales más seguros y sostenibles, sino también allanar el camino hacia su aplicación real en el mercado.
El CiQUS cuenta con el reconocimiento CIGUS de la Xunta de Galicia, que acredita la calidad e impacto de su investigación, y recibe apoyo financiero de la Unión Europea a través del Programa Galicia FEDER 2021-2027.
Miembros del proyecto durante el Kick-Off Meeting | Foto: BioMaps